Nuestro ADN remonta a los años 1953, proveniente de Rusia, Samuel Lew Fridman, inicia sus operaciones en Argentina.

La pasión por lo excelso, los metales nobles y las piedras preciosas se lleva en la sangre y se transmite de generación en generación.

Si a esta pasión le incorporamos métodos, optimización de procesos productivos, aplicación de geometría euclídea y mucha música y amor, obtenemos el resultado que les estamos presentando.

Gracias.